Me rindo a
tus pies, sedienta de tu agua, de tu sombra y de luz.
Camino
tras tus pasos, pero no vuelves tus ojos hacia mí.
Soy polvo
reseco que en el viento se desintegra si no me sostiene tu raíz.
Me desvanezco
en el abismo de tu andar si no puedo llegar a ti.
María
Eugenia Rojas
0 comentarios:
Publicar un comentario